Se conocen como Tules en el estilo ITF y como Poomses en el estilo WT. Están relacionadas directamente con los grados (Kup o Dan), puesto que son necesarios para el avance dentro del arte marcial; se memorizan y repiten con objeto de incrementar el equilibrio, la elasticidad, la rapidez, la concentración y el dominio de los diferentes movimientos, habilidades básicas para el practicante de Taekwondo.
En la realización del Poomse es muy importante la correcta ejecución técnica, potencia y fuerza, equilibrio, estética de los movimientos, concentración y coordinación de los mismos, posición de todo el cuerpo al realizar cada técnica y acabar en el mismo lugar donde se inicio.
Dentro de la World Taekwondo Federation (WT) existen ocho formas básicas que son denominadas Poomses Taeguk, ordenados según su dificultad. Estos Poomses han aparecido a raíz de los Poomses Palgwe, los primeros que aparecieron en la práctica del Taekwondo.
Además, existen nueve Poomses Superiores con nombre propio y otras formas más simples de interés pedagógico y dirigido a estudiantes noveles llamados Kichos (cinturones negros).
Los Poomses tienen su origen en el libro “I Ching”, un oráculo Chino. El I Ching tiene 64 hexagramas, una combinación de ocho series de tres líneas, cerradas o partidas. Las series de tres líneas se llaman trigramas. Las líneas cerradas representan Yang, las abiertas Ying. En lenguaje Chino, la unidad de Ying y Yang se llama “taichi”. En lenguaje Coreano, la unidad se llama Tae-guk. Esto explica el término Poomse Taeguk.

Los ocho trigramas juntos se llaman Pal-gwe, de ahí el término Poomse Palgwe. Cada Poomse lleva asociado un trigrama que resume su significado.
El principio de los Poomse es TAEGUK, que comprende dos palabras complementarias: ‘TAE’, que significa grandeza, y ‘GUK’, que significa eternidad. Esta palabra trata de representar el infinito, pues al igual que él, es indefinido, no tiene ni principio ni fin, representando toda forma de vivir y sentir, resaltando toda una filosofía, tanto de vida real como de espiritual.
Los Taeguks, son el espíritu del Taekwondo, en ellos se representa la filosofía oriental, el Todo Infinito. “El libro de los cambios” explica que los 8 “Gwe” son el origen del mundo: Keon, Tae, Ri, Jin, Seon, Gam, Gan y Gon, que representan cielo, lago, fuego, trueno, viento, agua, montaña y tierra. También representan los ocho puntos y direcciones: Sur, Sureste, Este, Noreste, Suroeste, Oeste, Noroeste y Norte.
Si recorremos estos ocho GWES en el sentido en que forman el fundamento del libro de los cambios, obtendremos las siguientes disposiciones:

Tenemos pues, en los hijos, el elemento movilizador en sus diversos estadios: comienzo del movimiento, peligro en el movimiento, descanso y consumación del movimiento. En las hijas vemos el elemento de la entrega, la abnegación en sus diversos estadios: Una suave penetración, claridad y adaptación, serena calma.
Para obtener luego una diversidad mayor aún, pronto se combinaron también estas ocho imágenes, obteniendo los 64 signos o hexagramas, que se componen de 6 trazos positivos o negativos.
Los signos pueden ser observados desde distintos puntos de vista, el premundano y el intramundano. En el premundano los signos se relacionan por pares, pero sus efectos no se perturban, sino que sostienen un recíproco equilibrio. En el intramundano la relación es con los hombres y sus distintas facetas y trabajos.
Esto relacionado con los Poomses, nos indica que estos tienen una dualidad, tanto física (ataques, defensas) como espiritual (es necesaria una concentración, sentir dentro cada movimiento, ejecutarlo tratando de demostrar lo que sentimos) y nos relaciona un poco más en los movimientos en que representamos una tradición, movimientos que se realizan lentamente y con una gran concentración. En estos movimientos siempre se representa el IM-YANG, (fuerza se opone a otra): Ante una fuerza que se nos opone (YANG), que debemos vencer, defender o absorber, la cual no solo es física, sino también psíquica (espiritual), realizamos una técnica (UM), una defensa, una absorción del ataque contrario, con la máxima concentración del movimiento.